
¿Qué es la ortodoncia?
La ortodoncia es una rama de la odontología que se ocupa del estudio, diagnóstico, prevención y tratamiento de las malposiciones dentales y de las irregularidades en el crecimiento y desarrollo de los huesos de la mandíbula y maxilar. El objetivo principal de la ortodoncia es corregir la posición de los dientes y mejorar la mordida para lograr una mejor función y una estética dental adecuada.
La ortodoncia, por lo tanto, no solo se centra en la alineación de los dientes, sino que trata de corregir cualquier anomalía y alteración de los maxilares, de la cara, problemas de oclusión y cualquier trastorno funcional de masticación.
El tratamiento de ortodoncia consiste en la colocación de brackets o aparatos fijos que se adhieren a los dientes mediante un adhesivo especial. Estos brackets se conectan entre sí mediante un alambre que se ajusta en cada consulta, ejerciendo una fuerza constante sobre los dientes y moviéndolos gradualmente a su posición deseada. En algunos casos, también se pueden utilizar alineadores transparentes, que son una alternativa a los brackets y ofrecen una mayor estética.
Duración de tratamientos de ortodoncia
El tratamiento de ortodoncia puede durar varios meses o incluso años, dependiendo de la complejidad del caso y de la edad del paciente. Es importante que el tratamiento de ortodoncia sea llevado a cabo por un especialista en ortodoncia, que es un odontólogo con formación específica en este campo.
La duración del tratamiento de ortodoncia depende de varios factores, como la complejidad del caso, el tipo de problema dental a tratar, la edad del paciente y la eficacia en el seguimiento de las instrucciones del ortodoncista por parte del paciente. En general, la duración promedio del tratamiento de ortodoncia es de 1 a 3 años, pero en algunos casos puede ser más corto o más largo.
Es importante destacar que la duración del tratamiento no solo depende de la colocación de los brackets o aparatos de ortodoncia, sino también de las citas de seguimiento con el ortodoncista para ajustar el tratamiento y monitorear el progreso. Es fundamental que el paciente cumpla con todas las citas y siga las recomendaciones del ortodoncista para obtener los mejores resultados en el menor tiempo posible.
En algunos casos, se pueden presentar complicaciones o imprevistos durante el tratamiento de ortodoncia, lo que puede aumentar el tiempo necesario para lograr los resultados deseados. Por ejemplo, si un diente no se mueve según lo previsto o se rompe un bracket, se puede requerir un tratamiento adicional para solucionar el problema y ajustar el tratamiento.
En resumen, la duración del tratamiento de ortodoncia varía según el caso individual de cada paciente y se determina después de una evaluación cuidadosa y un plan de tratamiento personalizado por parte del ortodoncista.
Tipos de aparatos de ortodoncia
Además de los brackets y los alineadores transparentes, existen otros tipos de aparatos de ortodoncia que pueden utilizarse en casos específicos. Por ejemplo, los brackets linguales se colocan en la parte posterior de los dientes, lo que los hace invisibles desde el frente, aunque tienen algunas desventajas como la dificultad de limpieza y la mayor molestia inicial. También existen los expansores palatinos, que se utilizan para corregir problemas de mordida cruzada, y los aparatos de tracción extraoral, que se utilizan para corregir problemas de crecimiento y desarrollo de los huesos faciales.

En cuanto al momento ideal para empezar un tratamiento de ortodoncia, lo más común es realizarlo durante la adolescencia, cuando los huesos y los dientes aún están en proceso de crecimiento y desarrollo. Sin embargo, los adultos también pueden recibir tratamiento de ortodoncia, aunque puede ser más complejo y llevar más tiempo debido a que los huesos han dejado de crecer.
Es importante destacar que el tratamiento de ortodoncia no solo tiene beneficios estéticos, sino que también puede mejorar la función masticatoria, la salud periodontal, el habla y la autoestima del paciente. Sin embargo, es necesario tener en cuenta que el tratamiento de ortodoncia requiere de un compromiso por parte del paciente, que debe mantener una buena higiene bucal y acudir a las citas de seguimiento para lograr los mejores resultados posibles.
¿Cómo saber si necesitas ortodoncia?
Existen varias señales que pueden indicar que necesitas ortodoncia. A continuación, trataremos algunas de las señales más comunes:
- Dientes apiñados o desalineados: si tus dientes están muy juntos o desalineados, es posible que necesites ortodoncia para corregir su posición.
- Mordida cruzada o abierta: si tus dientes superiores e inferiores no se juntan correctamente cuando muerdes, es posible que necesites ortodoncia para corregir tu mordida.
- Espacio excesivo entre los dientes: si tienes espacios grandes entre tus dientes, es posible que necesites ortodoncia para cerrar estos espacios.
- Protrusión dental: si tus dientes superiores sobresalen demasiado hacia afuera, es posible que necesites ortodoncia para corregir la protrusión dental.
- Dificultad para morder o masticar: si tienes dificultades para morder o masticar los alimentos, es posible que necesites ortodoncia para corregir tu mordida y mejorar la función de tu boca.
- Dificultad para limpiar los dientes: si tus dientes están muy apiñados o desalineados, puede ser difícil limpiarlos adecuadamente, lo que puede aumentar el riesgo de caries y enfermedades de las encías.
Si presentas alguna de estas señales o tienes alguna preocupación acerca de la posición de tus dientes o tu mordida, lo mejor es consultar con un ortodoncista para una evaluación y obtener una opinión profesional. El ortodoncista podrá determinar si necesitas ortodoncia y recomendarte un plan de tratamiento personalizado.